Sucedió en Tallín, Estonia. Un tren que cubría la ruta desde Moscú frenó tarde y mal, casi atraviesa la estación y reduce a un sello de metal a este BMW Serie 5. Sin embargo, no fue así, y el coche apenas presenta unos ridículos daños superficiales. Es que es un coche muy bien hecho.
Los bávaros son capaces de resistir proyectiles de diverso calibre,ensartamientos, incrustaciones de rueda, inmersiones en el barro e incluso cargar con airbags más grandes que los de serie. Ahora también demuestran ser a prueba de locomotoras, ¿qué fabricante presume de eso? ¿y con 4 estrellas EuroNCAP?
Si os fijáis en esta fotografía, hay una señal doblada tras el coche, lo que invita a pensar que fue arrastrado por la locomotora. Lo más probable era que el coche acabase siniestro total, por decir algo suave. Viendo los demás ángulos, nada nos dice que ese BMW no vuelva al asfalto sin reparaciones de importancia.
El que pilote un poco de lenguas raras europeas, puede atreverse con un par de vídeos de Ekspress y Reporter, ambos afincados en páginas estonias. Creo que dicen algo de haber usado god mode, pero por eso no te multan.
Ahora viene la pregunta del millón, ¿qué pintaba ese coche ahí?